La Policía Nacional Civil (PNC) es una institución afectada por los problemas financieros, y ahora por los constantes ataques contra sus efectivos, en los que han muerto 29 agentes. A esos obstáculos hay que sumar que compró 10 mil chalecos blindados que podían ser perforados por balas que se venden en el país.
La compra de esos chalecos tuvo costo de Q39.1 millones, y se efectuó por medio de Industria Militar, del Ministerio de la Defensa, la cual a su vez hizo la solicitud a la empresa colombiana Miguel Caballeros.
Nuevamente el espectro de la corrupción, aparece en escena, que lamentable que siendo una de las instituciones que necesita del mejor equipamiento para hacerle frente al crimen organizado y a los altos índices de violencia, resulta que se invirtieron casi Q 40 millones, en chalecos blindados que no son seguros, lo que si es seguro es que pagaron el precio de un articulo de buena calidad, y debido a la corrupción recibieron una mala imitación.
Hasta cuando seguiremos permitiendo estos actos asquerosos de nuestras autoridades, a quienes en su afán de embolsarse unos cuantos milloncitos de Quetzales, no les importa poner en peligro la vida de los miembros de la Policía Nacional Civil
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